viernes, 28 de octubre de 2022

¿QUIÉN PONE EL LÍMITE?, NO DEBERÍA HABERLO


Me ha resultado extraño no encontrar fotos en la web oficial de la Suma Flamenca de la Tremendita con la orquesta que llevaba atrás en la segunda parte de su repertorio.

Como hacía Morente, en un momento de su actuación se abría un segundo telón y salía toda una orquesta detrás, con baterías, guitarras eléctricas, bajos... etc.

Abrió por Tarantos y continuo con un amplio repertorio, Soleá, Siguiriyas, Tangos, Alegrías (acompañadas de bajo y percusión), Peteneras... un homenaje a Lorca y a Morente, un recuerdo a su familia.

Todo correcto, todo cantado con mucha personalidad y con duende, ella es artista no cabe la menor duda, pero es una cantaora o cantante para un publico muy diverso, quizás mucho más variado que otros artistas y ella lo sabe.

Me gusta que intercambie cantes hechos de forma más clásica con una mezcolanza en su repertorio de formas más actuales (digámoslo así).

A mi me gustó, me gustó en parte, la verdad es que cuando salió con toda la orquesta yo no lo asimilaba al flamenco y reconozco que hacía flamenco, cantó por Siguiriyas, per no me pellizcaba, necesitaba eso "...aquí cuando se dice ole..."

La Tremendita sabe cantar y sabe hacerlo por derecho, pero ella busca su forma peculiar de hacer los cantes, esa forma que a veces los que estamos ya en una generación algo curtida en años no llegamos a entender del todo. Es necesario, claro que sí, atrae público diverso, el teatro del Canal estaba lleno con las entradas agotadas hacía una semana, con esto es imprescindible que se hagan estas cosas.

La persona que viene a ver este tipo de espectáculos al final indaga en lo que ella hizo referencia muchas veces, en su dinastía flamenca, en los antecesores flamencos que nos dejaron el legado que hoy tenemos. Por ello el flamenco no está en crisis, al contrario está en un buen momento y si lo que buscas es algo "puro" lo tienes y si lo que buscas es "variado" también lo tienes y, lo bueno de esto, es que hay público para todo.

En resumidas cuentas, una gran cantaora, estoy convencido de ello, una estupenda cantante y ante todo para un público nuevo, para mi yo ya estoy en otra onda, pero necesitaba escucharla en directo.

Rosario La Tremendita en la voz, guitarra y bajo eléctrico.

Pablo Martín Jones en la batería y electrónica.

David Sancho en los teclados.

Juanfe Pérez en el bajo eléctrico.

Joselito Acedo en la guitarra.

Todos los músicos tienen una calidad artística excelente, pero permítanme que destaque al guitarrista Joselito Acedo con un toque personal, limpio y con un acompañamiento extraordinario.

lunes, 24 de octubre de 2022

TRES SUMA TRES

La Suma Flamenca sigue sumando éxitos en su programación.

Tres Suma tres es una forma de resumir tres ventos de este fin de semana, el primero El pele el pasado día 21 en la Sala Verde del Teatro del Canal junto con la guitarra del Niño Seve "A Sangre", así se presentaba su espectáculo.

No cabe la menor duda que El Pele es uno de esos cantaores de esencia propia que sigue demostrando unas grandes facultades y que sigue derrochando mucho arte.

No fue, para mí, la mejor de sus actuaciones, por la razón que fuere no se encontraba a gusto en el escenario, miró el reloj en varias ocasiones, algo fallaba.

Pero no se puede decir que cantara mal, al contrario cantó muy bien, pero algo le faltó, romper hielo, soltarse como él sabe hacerlo.

La figura del Niño Seve con su guitarra demuestra que es un tocaor a la altura indiscutible de los más grandes guitarristas actuales y que para acompañar al Pele es el idóneo.

Fue un placer compartir esa noche con estos 2 grades del cante, pero me faltó la plenitud.

Hasta el Escorial al Teatro Real Coliseo de Carlos III nos desplazamos para disfrutar del baile de Mª Paz Lucena en un recuerdo al genial bailaor El Guito.

Un teatro acogedor y un teatro de época, sobre 1750 más o menos acogió un cuadro artístico digno de mencionar.

Como bailaora principal Mª Paz Lucena presentando "La raíz de mis zapatos" un espectáculo dende la presencia virtual de El Guito siempre estaba presente, Farrucas, Soleares, Siguiriyas.... Palos que con su elegancia y presencia inundaban aquel teatro como si de una estrella fugaz viniera a darnos luz en épocas de sombras.

Que bien se recibe un flamenco más clásico cuando los teatros se llenan de innovaciones, necesarias si, pero complementadas aún mejor.

Mª Paz estuvo acompañada de otro genio también discípulo de Guito, Miguel Téllez.

Miguel está sembrado como se dice en el argot flamenco, Miguel domina con su arte cualquier espacio, sea grande o pequeño. Es elegancia y estilo, eso lo recibe de su maestro con el que compartió escenario mucho tiempo.

Miguel baila con la medida justa sin pasarse pero sin quedarse corto. Lo dio todo, bailando solo o con Mª Paz, haciendo y rememorando aquellos momentos de baile a dúo que El Guito protagonizara en sus mejores tiempos.

Sergio El Colorao y Antonio Heredia, cantaores, Manuel Fernández y Juan Serrano, guitarrista, Eloy Heredia, flauta, Belén Molina, Mari Muñoz y Satsuki Oshiro, cuerpo de baile. Sin un buen elenco detrás todo quedaría siempre muy pobre y por ello Mª Paz en su grandeza bailaora necesita tener detrás un grupo como el que llevó y que sin duda alguna complementó la noche para llegar al punto cumbre necesario.

Y el domingo 24 Carmen Linares, esa mujer que sin ser de Madrid, es madrileña por los cuatro costados. Ha sido, es y será la señora de Madrid.

Carmen Linares canta a Madrid. Es verdad que a Carmen el público madrileño la quiere con locura, una mujer que domina el cante, Malagueñas, Abandolaos, Tarantos y Cartageneras, Siguiriyas, Tonás, Bulerías, Bulerías por Soleá, Alegrías, Fandangos de Huelva, un amplio repertorio que salvó con su señorial cante, con su voz inconfundible y con su estilo propio al hacer los cantes.

Su voz rajada empezó a romper al tercer cante, ahí se empezó a ver a la Carmen cantaora como yo la recuerdo. Pero eso sí, se entregó desde el primer momento, no falseaba nada de lo que hacía, corazón y experiencia sobre el escenario, lo repito, ha sido, es y será siempre la Señora de Madrid y ojo, hoy en día la mujer cantaora por excelencia.

Por Tonás y Siguiriya bailó con elegancia sublime Pepe Torres, esa esencia pura y señorial del bailaor de Morón que junto a Carmen rindió pleitesía a Madrid. Pepe Torres baila como si no bailara, es presencia sobre el escenario, sale con planta firme y se reafirma con cada paso, con cada desplante, siempre mirando cara a cara a su público.

Salvador Gutiérrez y Eduardo Espín fueron las guitarras que acompañaron el dulce eco de Carmen y la bravura de Pepe. Ana María González y Rosario Amador en coros y palmas, aunque también se hicieron sus cantecitos por Alegrías y por Fandangos de Huelva y como no, el el final de fiesta también lo hicieron por Bulerías. 

Tres grandes noches TRES SUMA TRES

viernes, 21 de octubre de 2022

ESPERANZA FERNÁNDEZ SUMA


El pasado día 21, en el Teatro la Abadía, un espacio con un encanto espacial acogió entre sus paredes al encanto sublime de la cantaora trianera Esperanza Fernández.

Como ella dijo, hacía mucho tiempo que no subía a Madrid a cantar de forma clásica o pura como se dice en el argot flamenco, cantar puro.

Es verdad que ella hace incursiones en otras músicas, pero para mi, creo que siempre es pura.

Arrancó por Peteneras, en homenaje a la Niña de los Peines, hizo siguiriyas que estremecieron los muros de la Abadía, unas Siguiriyas que culminaron con un estilo de Manuel Torres y que cuando ya pensábamos que entraría por cabales lo que hizo fue pasar a la Serrana y rematar con Abandolaos.

Igual hizo en el recorrido a los cantes de Ida y Vuelta en memoria de Pepe Marchena.

Que decir de sus Tangos, o su final por Bulerías comenzando con un homenaje a La Paquera de Jerez, un genio en este estilo.

Pero tampoco podemos dejar pasar de lado la Soleá de de Triana que culminó con una Caña que la cantó a mucha velocidad haciendo de este cante un cante especial y muy rítmico.

Hizo durante su actuación una dedicatoria a las mujeres y a esa lucha por la igualdad que ella misma reconocía que en una época tenían poca o ninguna cabida en el flamenco o entrar en las tabernas, donde se prohibía el cante, como así se titula su último disco "se prohíbe el cante" un disco grabado totalmente en directo y que tras el parón de la pandemia por fin salió a la luz. Un homenaje merecido a aquellas mujeres que forjaron un flamenco que hoy está en vigor gracias a ellas, La Andonda, La Serrana, La Paquera, La Repompa, Fernanda y Bernarda de Utrera, La Serneta... Pero eso sí, también dedicado a todas las mujeres, no solo a aquellas que dieron lugar a formas del cante que hoy se interpretan sobre los escenarios.

Junto a la cantaora Esperanza Fernández estaban grandes artistas y músicos, como la guitarra de Miguel Ángel Cortés, un guitarrista muy por encima de su tiempo, eso es otro nivel en la guitarra. En las palmas y en el compás Miguel Fernández hijo de Esperanza y Dani Bonilla y el percusionista Jorge el Cubano.