Ver a un público en pie, aplaudiendo a la figura del maestro
Juan Cantero no por menos que se me saltaron las lágrimas de la emoción, ni si
quiera sé cómo pude seguir con la presentación.
Quiero expresar en primer lugar mi más profundo
agradecimiento al Ayuntamiento de Leganés y concretamente a los Técnicos de
Cultura, a los técnicos de sonido y al personal auxiliar del teatro, la buena
disposición para poder realizar este evento.
También a Toñi Álvarez de la Junta de Extremadura que ha
posibilitado el desplazamiento de los artistas que venían de forma desinteresada.
También a mi querido amigo Diego Gallardo que ha sido un
puntal fundamental en la coordinación del festival entre Extremadura y Madrid.
También a Flamencos de Extremadura que aportó las nuevas
figuras, esos cantaores y cantaoras y a esos guitarristas que son la nueva esencia
de la cantera extremeña.
Y por supuesto también mi más sincero agradecimiento a los
veteranos del flamenco extremeño que han querido homenajear a su paisano Juan
Cantero.
Unos meses de duro trabajo que culminó en la esencia de un
festival flamenco emotivo en donde floreció los cantes autóctonos de la tierra
y todo con el fin de reconocer la carrera artística y la personalidad cantaora
de Juan Cantero, ese baluarte de los cantes extremeños que ha paseado por todo
el mundo. Pero como bien decía Miguel Vargas, no solo ha sido un maestro de los
cantes extremeños, ha sido un maestro del flamenco. Y Alejandro Vega
puntualizaba a los jóvenes - "bebed, esta es la esencia"- y que
verdad Alejandro.
Juan se emocionó ante un teatro lleno que quiso demostrarle
que Él sigue vivo entre la afición flamenca. Y Él, Juan Cantero así lo demostró
dejándonos sobre el escenario su sello personal y propio en los Jaleos, ese
cante heredado de su familia y que domina con una naturalidad que sorprende.
Retirado de los escenarios y habiendo pasado por diferentes etapas
criticas de salud, Juan tiene facultades y fuerzas aún para decir, "aquí
estoy yo".
Su planta, su forma de ser, su forma de estar y vuelvo a
decir, su forma de estar, esa prudencia que caracteriza sin duda alguna a los
cantaores de arraigo, esos cantaores que han pasado grandes fatigas para sacar
a su familia adelante, eso hacen de Él que sea una excelente persona y un
excelente artista.
Me siento feliz y lleno de haber compartido una noche con
tantos aristas de mi tierra y, haber compartido una noche con Juan Cantero, no
solo en el teatro, sino también en el bar restaurante Los Ángeles en donde
continuó la velada, no hay palabras para describirlo.
Como recuerdo de esta noche hicimos entrega de dos cuadros.
En uno la firma de todos los artistas que han participado en
dicho homenaje y en el otro un dibujo de la figura de Juan Cantero realizado
por la mano del pintor sevillano de la Puebla de Cazalla Patricio Hidalgo.
Dos recuerdos que Juan recibió con todo el cariño del mundo y
emocionado, como ya dije al principio, ante unos artistas entregado a su
homenaje y ante un público que varias veces puso en pie.
Nos quedará para siempre el recuerdo de un Juan Cantero
único y un baluarte de los cantes extremeños.
Gracias de nuevo a toda la afición flamenca, a todas las
personas que de una forma u otra han hecho posible que hoy, Juan Cantero, el
maestro, sea un poco más feliz.
No hay comentarios:
Publicar un comentario