El pasado lunes día 6 de septiembre se celebró en la plaza de Alcorcón junto a la Iglesia el V Festival Flamenco organizado por la Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de la localidad y la Peña Flamenco La Uvita de Salmerón.
Presentado por Miguel Ángel un buen amigo haciendo siempre alusiones a las comarcas cantaoras y a los estilos de cante que se hicieron de diferentes localidades Huelva, Cádiz, Sevilla, etc.
La noche la abrió Alfonso Salmerón con la guitarra de Rafael Andujar y Oscar salmerón a la percusión.
Alfonso con la guitarra del maestro Andujar y la percusión de su hijo pusieron al público en pie totalmente entregado al cante de su ilustre vecino.
Siguió el turo de Cancanilla de Málaga con la guitarra también de Rafael Andújar.
Cancanilla a sus 70 años tiene una voz plena de facultades con un sabor de duende que rebosa por los cuatro costados. Sigue cantando con la voz que tenía hace 30 años cuando yo le conocí, pero tiene la templanza que dan los años.
Tiene tantas tablas que sonando las campanas de la Iglesia se arrancó a cantar por Martinetes como si de una fragua que ocupa toda la plaza marcara el compás con el martillo pilón.
Magistral en la Soleá por Bulerías, por Siguiriyas sigue siendo el maestro y por Bulerías se atrevió a meter una malagueña que cuadró a la perfección.
Ole, no se puede decir otra cosa.
Un cuadro de lujo, quizás deslucido por la falta de sonido para el taconeo del baile y el mal sonido que ofrecen los escenarios de los festivales de plaza si no se cuida el suelo y se le coloca uno técnico.Pero aún así, lucieron su baile como grandes profesionales cargados de duende y emotividad, suplieron parte del taconeo con movimientos de brazos y cuerpo elegantes y señoriales.
El Trini como siempre no defrauda, su voz a veces rota por su eco asombra y siempre da la talla y la guitarra de José Almarcha, un guitarrista joven con hechuras de viejo. Su toque es personal y con mucha fuerza.
La noche la cerró La Yiya con la guitarra del maestro Antonio Carrión.
La Yiya no defrauda nunca, sabe y hace los cantes con cierta personalidad y llega al público de forma emotiva, Tientos Tangos, Siguiriyas y Fandangos fueron parte del repertorio que nos ofreció durante la noche. Todo lo hizo bien, lo dicho, lo hizo bien.
Como dijo uno del público, con una guitarra como la de Antonio quien no canta bien, por que Antonio Carrión es una de las guitarras por excelencia para acompañar al cante y eso se ve.
La noche culminó con un final de fiesta que puso broche de oro a un gran festival que disfrutamos en Alcorcón. Que no decaiga la fiesta.
La calidad de las fotos no son buenas pero se aprecia lo que la noche ofreció.
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