El pasado viernes, la
Asociación Cultural Flamenca Jondo, presentó en el Teatro Enrique Tierno
Galván, la temporada flamenca que precederá al acto.
Una mesa formada por D. Ángel
Luis, del Bar Restaurante Los Ángeles, D. Pedro Luís Zambrano, presidente de la
Asociación Cultural Flamenca Jondo y un servidor, Juan José Gil, secretario de
dicha Asociación.
En esta primera parte,
hablamos de Las Noches Flamencas de los Ángeles, de los cursos de guitarra, del
concurso Silla de Oro y, de las diferentes actividades en las que colaboramos.
Un cuadro de baile, en donde
se pretendía como primer objetivo, buscar lo añejo, lo casi perdido en el
baile, lo que no se ve, pero sin perder la personalidad de cada uno de los
artistas.
Noe Barroso, puso la elegancia
sobre el escenario, dándolo todo por el todo, corazón, sensibilidad,
profesionalidad fuerza, presencia, dulzura… No faltaba de nada.
Maximiliano Rebman era la
esencia de los movimientos que transportaban a otro tiempo lo que me llamó la
atención, me recordaba a los viejos maestros, pero en las hechuras de un
bailaor joven.
Su noche la cerraron por alegrías,
todos, como en una fiesta familiar, en la esquina del escenario, a oscuras
cantando con el compás de las palmas y grata sorpresa, Noé nos cantó por alegrías
y posteriormente por bulerías.
Después de empezar por
alegrías en la esquina del escenario la luz se va haciendo cada vez clara, como
si el día amaneciera para continuar una fiesta que acabó con un final por
bulerías.
Gracias al público que nos
acompañó y gracias también a los artistas.
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