ADIOS AL MAESTRO CANELA DE SAN ROQUE

 

Nuestro querido amigo Canela de San Roque nos a dejado hoy a las 8:30 de la mañana tras una larga enfermedad.

Cuando canela cantaba los pilares de cualquier recinto temblaba. Su cante era pura esencia flamenca, heredero de una tradición flamenca difícil de encontrar hoy en día.

Su cante es profundo, con sentimiento, con duende. Arropado siempre con las palmas de sus hijos se crecía, se subía a los escenarios y su voz se llenaba de duende flamenco. Mejor no se puede cantar.

Hoy se nos fue uno de los grandes del flamenco, difícil de de igualar, porque su cante es añejo, es un cante vivido. Como decía la Piriñaca "Cuando canto por siguiriyas la boca me sabe a sangre", ese es el cante de Canela, sangre.

Los fandangos del Vizco Mate. Sus siguiriyas como puñales, sus soleares vestidas de mantos negros, sus bulerías por soleá que eran capotazos al aire llenos de expresión.

Hoy el flamenco esta triste porque se nos fue uno de los pocos descendientes que nos quedaba de Antonio Mairena, Alejandro Segovia Camacho, conocido en el arte flamenco como Canela de San Roque

Canela mantenía una gran personalidad, un profundo sentimiento, un sensacional poderío y sobre todo apegado a la tradición y sin concesiones a la galería del modernismo.

Por ello, quizás, no se ha convertido en un cantaor de masas y sólo se reconoce su valor en los ambientes de aficionados cabales y en las peñas flamencas

Entre sus muchos premios se recuerda su triunfo en el Yunque Flamenco de 1.996. Con la guitarra de Lalo Macías interpretando unas impresionantes seguiriyas.

Las jornadas Flamencas de la Fortuna del 2007, fueron el punto de partida de un cantaor al que se le echó al olvido y que le hicimos resurgir para el bien del mundo del flamenco.

Como me acaba de decir su Hijo, José canela, es el mejor cantaor del Campo de Gibraltar de los últimos 50 años. Yo diaria uno de los más grandes cantaores de los últimos 50 años.

El Colegio Mayor Universitario Isabel de España reconoció su trayectoria artística dándole el Premio Tío Luís de la Juliana en marzo del 2003.

Desde Jondo y desde mi persona, estimado amigo descansa en paz.